¿Te gustaría lucir una piel de porcelana? Entonces es importante que exfolies tu piel al menos una vez a la semana, hacerlo te ayudará a retirar las células muertas y tu piel se verá fresca y renovada.
Sigue estos 9 pasos para exfoliar tu piel sin lastimarla:
Foto de Ricardo Garcia en Pexels
Lava tu piel con agua tibia, de preferencia usa jabón neutro.
Evita utilizar cepillos o esponjas ya que la piel muerta puede acumularse entre sus cerdas o en los orificios y esto puede ocasionar que los poros de tu piel se infecten la próxima vez que los utilices.
Usa toallitas exfoliantes o guantes y lávalos perfectamente al terminar de usarlos, si puedes déjalos secar al aire libre.
Si vas a exfoliar tu cara hazlo con las yemas de tus dedos de preferencia.
Elige el producto dependiendo tu piel, en el mercado encontrarás productos granulados, en crema o en gel. Si decides usar un exfoliante casero (como limón con azúcar), cuida que los ingredientes no maltraten tu piel.
Al exfoliarte debes de tener tu piel ligeramente húmeda, hazlo con movimientos circulares y concentra tu atención en las zonas ásperas como codos, tobillos y rodillas.
Al terminar, enjuaga con agua fría, el cambio de temperatura ayuda a activar la circulación de la sangre.
Da pequeños golpes sobre la zona que exfoliaste para que los poros de tu piel cierren.
Aplica una crema hidratante, consigue en el mercado la que mejor se adapte a tu tipo de piel. Te recomendamos una crema de avena, te deja una piel tersa y suave.
