Obesidad afecta respuesta del cuerpo ante COVID-19

El sistema inmune responde de una manera agresiva al virus, pero sin efectos.

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Obesidad afecta respuesta del cuerpo ante COVID-19
Pixabay

La obesidad aumenta el riesgo de que el sistema inmune no reaccione de forma adecuada ante el contagio de COVID-19, por lo que esto también podría ser un factor a considerar al momento de crear una vacuna.

Desde que inició la pandemia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que enfermedades como hipertensión o diabetes podrían empeorar los síntomas de la COVID-19, por lo que fueron considerados población de riesgo junto con niños, adultos mayores y personas con enfermedades respiratorias.

Este estudio confirma que las personas con obesidad reaccionan de forma diferente al virus, lo cual también podría afectar la efectividad de la vacuna debido al mal funcionamiento del sistema inmune.

Sistema inmune hiperactivo

Un estudio publicado en Endocrinology, la revista de la Sociedad Endocrina, señala que cuando una persona con obesidad contrae la COVID-19 su sistema inmune se hiperactiva sin que esto implique necesariamente un combate a la enfermedad.

El trabajo fue realizado por varios investigadores de la Universidad de Michigan y tenía por objetivo encontrar qué relación hay entre el sistema inmune y su respuesta contra la COVID-19  en pacientes con obesidad.

Las conclusiones señalan que los macrófagos del sistema inmune los que determinan qué tan grave pueden ser los síntomas y que en personas con obesidad provoca una respuesta inmunitaria hiperactiva que más que combatir el virus, sólo un desgaste de energía muy necesario para resistir.

Un adelanto para la vacuna

La importancia de estudios que analicen el comportamiento del sistema inmune en personas con obesidad recae en que estos trabajos también sirven para el desarrollo de vacunas y fármacos que sean eficaces en toda la población o que incluso permitan generar distintos tipos de vacunas.

Así lo declaró el investigador Durga Singer, quien confesó que uno de los retos de la pandemia de COVID-19 fue descubrir la complejidad de las interacciones entre la diabetes y otras enfermedades infecciosas agudas (como la nueva cepa de coronavirus).

Con información de Europa Press