Además de la violencia obstétrica, la cual se ejerce por personal de salud en contra de las mujeres embarazadas durante el embarazo, parto y/o puerperio, existe la violencia ginecológica, la cual se refiere a malos tratos, prácticas inadecuadas, mala atención, intervenciones no autorizadas, así como uso de procedimientos innecesarios o intencionalmente dolorosos que se produce en perjuicio de las pacientes que asisten con personas especialistas en la salud de la mujer.
De acuerdo con La Tercera, citando la Encuesta Nacional Sobre Violencia Ginecológica y Obstétrica en Chile, realizada por la Colectiva Contra la Violencia Ginecológica y Obstétrica, la medicalización y la patologización de procesos que son naturales también se encuentran dentro de las agresiones que han vivido las mujeres en este contexto.
El ginecólogo se ha negado a mencionar a mi novio como algo que no fuese marido, se ha escandalizado al saber que no vivo con él, porque “la mujer debe dejarlo todo para estar con el marido”, y me ha dicho que con 32 años ya debería tener hijos. (Sigo)
— Azucena Martín (@AzucenaMS) May 12, 2021
“Los resultados que presentamos son sumamente preocupantes y nos muestran cómo la descalificación, la humillación y diversas expresiones de violencia, constituyen prácticas comunes en el sistemas público y privado de salud chileno”, destaca la colectiva al señalar que el 67% de las mujeres que entrevistaron señalaron que han sufrido violencia ginecológica.
De acuerdo con información recabada por Reporte Indigo, otras representaciones de la violencia ginecológica son:
Cuando el “especialista” usa un tono moralizante al juzgar ciertas prácticas sexuales
Cuando el personal de salud ginecológica realiza comentarios inapropiados haciendo alguna referencia sexual
Que el “profesional” realice tactos que hagan sentir vulnerada a la paciente, que sean inapropiados o que le causen dolor
Si el médico comete un acto de violencia sexual
En un artículo de Fundación para el Periodismo, Susana Mercedes, destaca que “la violencia ginecológica es otra forma de violencia de género cuando el especialista sobrepasa los límites de la revisión física”.
¿Qué mujer no ha sufrido violencia sexual en el transporte público de alguna manera? @CuidateMorra es una iniciativa para apoyarlas con un transporte seguro, e incluso identificar a los agresores. Conoce más aquí. 👇#bastadeviolencia https://t.co/Xh0x9p4emv
— ViBE TV (@ViBETVmx) April 19, 2021
Apunta que esa agresión puede incluir comentarios hirientes, machistas y racistas y escalar hasta maltrato o que se muestre indiferencia por las preocupaciones de la paciente en temas de salud sexual y reproductiva.
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