La actriz y directora Olivia Wilde brindó detalles de su política de “cero p*ndejos”, la cual salió a la luz el año pasado después de que ella despidió, por su pésimo comportamiento, a Shian LaBeouf de la cintaDon’t Worry Darling.
En una conversación que tuvo con la también directora Emerald Fennell, esto como parte de la serie “Directors on Directors” de Variety, Wilde se sinceró acerca de dónde surgió su política.
“Alguien, que es un actor y director muy establecido en esta industria, me dio un consejo realmente terrible que fue útil, porque sabía que tenía que hacer lo contrario. Dijo: ‘Escucha, la forma de obtener respeto en un set es tener tres discusiones al día. Tres grandes argumentos que restablezcan tu poder, que recuerden a todos quién está a cargo, sé el depredador’. Eso es lo opuesto a mi proceso. Y no quiero nada de eso”, aseguró Wilde.
Continuando con su explicación, la directora de cintas como Booksmart dejó claro que no apoya la idea de que el arte tiene que surgir desde un lugar de incomodidad.
“Creo que es una parte desafortunada del tipo de paradigma, que se ha creado durante los últimos 100 años, la idea de que el gran arte tiene que surgir de un lugar de incomodidad y ansiedad. Que la olla a presión tiene que llegar a un punto en el que pueda ser algo intenso y valioso de esa forma”, indicó.
Olivia Wilde también abordó el punto de que las mujeres ven la vida de manera diferente, ya que ellas, a diferencia de los hombres, creen que no necesitan intimidar a los demás para obtener su respeto.
“Creo que puede ser un instinto exclusivamente femenino decir: ‘Mira, podemos ser cariñosos. Y podemos realizar múltiples tareas’. No significa que alguien deba sentirse incómodo. Y no significa que tenga que recordarte constantemente mi puesto, porque no creo que nadie en un set haya olvidado quién está a cargo. De hecho, es un sistema increíblemente jerárquico”, detalló la actriz.
Así, la directora y actriz está segura de que es mucho mejor eliminar de la narrativa del héroe de esta estructura y “reconocer que un director es la suma de todas estas partes” y que tienen la oportunidad de delegar tareas a su equipo.
“La política de no imbéciles pone a todos al mismo nivel. También noté como actriz durante años cómo la jerarquía del set separaba a los actores del equipo de una manera tan extraña que no le sirve a nadie … Creo que a los actores les gustaría saber más sobre lo que está sucediendo allí cuando están prestando su atención. ¿Qué es ese cambio de lente? Pero la idea de no molestar a los actores y mantenerlos separados, y no mirarlos. Creo que pone a todos bastante ansiosos”, concluyó Wilde.
Tras esta explicación, sin duda los actores y personas que trabajen con Olivia Wilde en un futuro no olvidarán su política de “cero p*ndejos” en el set.
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