Tras resultados prometedores en animales, una primera vacuna contra el cáncer de mama acaba de ser autorizada por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) para comenzar los ensayos clínicos. Este nuevo avance, tras la autorización de un nuevo tratamiento innovador en acceso temprano contra el cáncer de mama triple negativo, añade una esperanza adicional en la lucha contra la enfermedad.
El cáncer de mama triple negativo es un cáncer agresivo y mortal. Más de una de cada diez mujeres con cáncer de mama desarrollan este tipo. Existen diferentes tipos de tratamiento contra el cáncer de mama: cirugía, radioterapia, quimioterapia, terapias dirigidas, terapia hormonal. La elección del tratamiento depende de varios factores (tipo, localización, tamaño, estado de salud del paciente, presencia de determinados receptores hormonales).
Un cáncer de mama triple negativo es un cáncer en el que las células cancerosas no tienen marcadores que les permitan responder a la terapia dirigida (estrógeno, progesterona, receptor HER2). Del 70% al 80% de los tumores de mama que se presentan en mujeres con mutaciones en el gen BRCA1 son cáncer de mama triple negativo.
Estos métodos no son suficientemente efectivos contra el cáncer de mama de tipo “triple negativo”. Sin embargo, un nuevo tratamiento prometedor acaba de ser autorizado en acceso anticipado, desde el 2 de noviembre de 2021 . Este es el Trodelvy, que puede administrarse a mujeres en punto muerto terapéutico, como parte del procedimiento de acceso temprano, a la espera de su comercialización.
Actualmente no existe una vacuna preventiva para el cáncer de mama.
Por lo tanto, es en este contexto que el equipo del Dr. Tuohy comenzó su investigación antes de 2010 que condujo a la creación de una vacuna experimental recientemente autorizada por la FDA para el inicio de ensayos clínicos.
Centrarse en esta vacuna experimental
La vacuna en estudio se dirige a una proteína de la leche, la alfa-lactoalbúmina. Esta proteína, normalmente producida en las mujeres durante la lactancia, también se expresa en el cáncer de mama. La activación del sistema inmunitario frente a esta proteína es gracias a la vacuna que permite, por tanto, una protección inmunológica preventiva frente a tumores mamarios emergentes que expresan esta proteína.
El estudio se basa en una investigación preclínica realizada por el Dr. Tuohy y publicada en 2010 en la revista Nature. Estos últimos han demostrado que activar el sistema inmunitario contra la proteína α-lactoalbúmina es seguro y eficaz para prevenir tumores mamarios en ratones. Además, esta investigación también reveló que una sola dosis de vacuna puede prevenir la aparición de tumores mamarios en modelos de ratones, al tiempo que inhibe el crecimiento de tumores mamarios ya existentes.
Vacuna contra el cáncer de mama: esperanza a largo plazo
Por el momento, el estudio se encuentra en la fase 1 de su desarrollo, es decir que la vacuna se prueba en un número reducido de pacientes (24 mujeres), para evaluar primero su toxicidad y determinar la dosis a administrar en la fase 2.
Se necesitan varios años para llevar a cabo todos los estudios de eficacia y tolerancia antes de que un tratamiento pueda comercializarse potencialmente. La esperanza a largo plazo de esta vacuna es que pueda prevenir el desarrollo del cáncer de mama triple negativo, que es la forma de cáncer de mama más agresiva y mortal.
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