¿Debería hacerle la circuncisión a mi hijo? Pros y contras de esta práctica

Un tercio de la población masculina está circuncidado. ¿Es esta práctica sólo una tradición religiosa o tiene un beneficio sexual o para la salud?

151
Circuncisión en niños
Foto: Pexels

La ablación del prepucio o circuncisión se practica desde los albores de los tiempos, como lo demuestran los jeroglíficos egipcios que datan del 2300 a.C. Aunque en nosotros este rito concierne principalmente a niños pequeños pertenecientes a la religión judía o musulmana, también se practica en adolescentes en las culturas animistas africanas. 

En total, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 661 millones de hombres mayores de 15 años fueron circuncidados en 2009, o alrededor del 30% de la población masculina mundial. 

¿Es más higiénico?

Cuando apareció por primera vez en los países cálidos, donde el agua no estaba fácilmente disponible, este gesto sin duda permitió mantener una mejor higiene. La piel en forma de cuello alto que cubre el glande mantiene efectivamente un ambiente cálido y húmedo, favorable a las maceraciones (y por tanto a los olores desagradables), mientras que los hombres circuncidados producen poco o ningún esmegma. 

Pero esta secreción no es sucia y, como disponemos de agua corriente, basta con retraerse en la ducha a diario para asegurar una perfecta higiene y evitar en particular el riesgo de balanitis, una dolorosa inflamación del pene.

Sin embargo, el argumento ha vuelto a la alfombra en el mundo anglosajón (Estados Unidos, Canadá, Australia, Sudáfrica, Nueva Zelanda y Gran Bretaña), donde la práctica de la circuncisión ha aumentado enormemente desde finales del siglo XIX hasta los años 70. 

¿La circuncisión puede limitar las ITS?

Varias encuestas, realizadas a mediados de la década de 2000, han demostrado que la circuncisión reduce a la mitad el riesgo de contraer el sida, reduciendo la cara interna de la membrana mucosa, que es permeable. 

Desde entonces, la OMS ha fomentado esta práctica en África para frenar la propagación de la enfermedad. También tendría cierta eficacia en la prevención de infecciones por virus del papiloma (VPH), clamidia y la transmisión del herpes, pero eso no es para nada una razón para prescindir del condón. 

¿Se reduce la sensibilidad del glande?

La mucosa del glande ya no está protegida, está constantemente en contacto con la tela de la ropa. Su superficie adquiere en pocas semanas una capa de queratina que la hace más gruesa. 

De ahí el miedo a que el órgano “al aire libre” pierda su sensibilidad, reduciendo el placer sexual y dificultando el logro del orgasmo. Si es así, esta pérdida de sensibilidad es mínima, porque la circuncisión no cambia la satisfacción de los hombres que se la han sometido, ni la de su pareja.

Infortunadamente para algunos que afirman que permite que los eyaculadores precoces “duren” más: nunca se ha demostrado que influya realmente en la capacidad de resistencia.

También hay eyaculadores precoces en hombres circuncidados, pero algunos dicen que han visto disminuir su hipersensibilidad gracias a esta intervención. Quizás un efecto placebo de origen psicológico. 

¿Todos pueden someterse a la cirugía?

El interés de la circuncisión no es discutible para los niños que sufren de parafimosis, es decir, cuyo prepucio muy estrecho dificulta el resquebrajamiento. Esto aumenta el riesgo de infecciones locales y urinarias, pero sobre todo provoca dolor durante la erección y un riesgo real de estrangulación del glande.

La intervención quirúrgica no es muy traumática, porque se realiza evitando el dolor: bajo anestesia general, luego con medicación durante la cicatrización (orinar podría ser muy doloroso en los días siguientes). 

Algunos de los beneficios en la salud que puede tener la circuncisión, de acuerdo con Mayo Clinic son:

  • Higiene más sencilla: La circuncisión hace que sea más simple lavar el pene. Sin embargo, a los niños no circuncidados se les puede enseñar a lavarse regularmente por debajo del prepucio.
  • Menor riesgo de padecer infecciones urinarias: El riesgo de padecer infecciones urinarias en hombres es bajo; no obstante, estas infecciones son más frecuentes en los hombres no circuncidados. Las infecciones graves que se presentan en las primeras etapas de la vida pueden causar problemas renales posteriormente.
  • Menor riesgo de contraer infecciones de transmisión sexual: Los hombres circuncidados podrían tener un menor riesgo de contraer ciertas infecciones de transmisión sexual, como VIH. Igualmente, las prácticas sexuales seguras siguen siendo esenciales.
  • Prevención de problemas en el pene: Ocasionalmente, puede ser difícil o imposible retraer el prepucio del pene no circuncidado (fimosis). Esto puede provocar inflamación en el prepucio o en la cabeza del pene.
  • Menor riesgo de padecer cáncer de pene: Si bien el cáncer de pene es poco frecuente, es menos común en los hombres circuncidados. Asimismo, el cáncer del cuello del útero es menos frecuente en las parejas sexuales femeninas de los hombres circuncidados.

En caso de no elegir la circuncisión para tu pequeño, no te preocupes ya que no representa un riesgo mayor, e incluso, se pueden evitar con el cuidado adecuado del pene. Este procedimiento tampoco es recomendable en caso de existir trastornos de circulación en la sangre y menos para los bebés prematuros o con anomalías en el pene. 

La circuncisión no afecta para nada la fertilidad, y como se mencionó anteriormente, no tiene repercusiones en el placer sexual de ellos ni de la pareja.

También te puede interesar:

Alertan por clínicas falsas de aborto en México

Lactancia materna: 11 consejos para tener éxito en esta etapa