La nueva Ley de Texas prohíbe el aborto después de las seis semanas de gestación, ante esto, más de 50 empresas, entre las que se encuentran Yelp, el servicio de reseñas en línea; Patagonia, fabricante de ropa; Lyft, una aplicación de transporte compartido, y más, han firmado una declaración que evidencia su posición en contra ante el dictamen.
“Restringir el acceso a la atención reproductiva integral, incluido el aborto, amenaza la salud, la independencia y la estabilidad económica de nuestros trabajadores y clientes”, se lee en el escrito compartido por la Planned Parenthood Federation of America, la American Civil Liberties Union, entre otros grupos.
Agregaron al comunicado que, “en pocas palabras, las políticas que restringen la atención de la salud reproductiva van en contra de sus valores y son perjudiciales para sus negocios”.
Otros firmantes incluyen al fabricante de helados Ben & Jerry’s, la compañía de cosméticos y cuidado de la piel The Body Shop y la aplicación de búsqueda de parejas Bumble. Las empresas que han firmado la carta emplean a más de 322 mil trabajadores.
El pasado 1 de septiembre entró en vigor la “Ley de latidos del corazón de Texas”, misma que prohíbe el aborto después de que se detecta un latido cardíaco, lo que generalmente ocurre 6 semanas antes de que muchas mujeres se den cuenta de que están embarazadas. La violación o el incesto no es una excepción, de acuerdo con el medio Info Barcelona.
Castigo para los que incumplan la Ley de Texas
Texas es el segundo estado más grande de los Estados Unidos. El proyecto de ley aprobado por los legisladores republicanos permite al público enjuiciar a los médicos que practican abortos a cualquier persona que ayude a terminar con un embarazo seis semanas después.
Un portavoz de los organizadores dijo que varios grandes empleadores de Texas, como Microsoft y Starbucks, se negaron a participar. Otras grandes compañías que, anteriormente se han expresado sobre la inmigración y otros temas, como Facebook, Amazon y Google, tampoco asistieron.
Por otro lado, un vocero de Microsoft comentó que la empresa no tiene ningún comentario que compartir por el momento.
“El hecho de que las empresas no se expresen públicamente no significa que no estén evaluando el impacto de la fuerza laboral y determinando cómo apoyar a los empleados dado el impacto dramático de la ley”, expresó.
Concluyó diciendo que firmar una declaración, únicamente es una herramienta, pero no representa el objetivo final.
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