El trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad (TDA/TDAH) tiene la forma de tres perfiles. Los perfiles se caracterizan por un predominio de determinados síntomas cognitivos y manifestaciones conductuales. El neuropsicólogo, al evaluar el funcionamiento cognitivo y las conductas de la persona evaluada, tanto infantil como adulta, identificará el perfil típico.
Trastorno por déficit de atención predominantemente desatento (TDA)
Este trastorno se caracteriza por una tendencia excesiva a la distracción (falta de atención o “estar en la luna”), por la dificultad para mantener la atención y por una sensibilidad al esfuerzo cognitivo (fatigabilidad). La lentitud significativa en la realización de tareas, ya sean tareas escolares o rutinas diarias, también se observa y mide a menudo en personas con TDA. A menudo se informa de olvido, sensación de no tener buena memoria, dificultad para mantener el esfuerzo cognitivo.
Un estudio prospectivo examina el papel de la #VitaminaD en la asociación entre la depresión materna y el riesgo de #TDAH en sus hijos, observándose un efecto perjudicial en los recién nacidos con #deficitVitaminaD. #AngelinienVitaminaD pic.twitter.com/hC90lvrsi2
— Angelini Pharma España (@AngeliniFarmaES) July 22, 2021
Trastorno por déficit de atención predominantemente hiperactivo-impulsivo (TDAH)
Este trastorno se caracteriza por una propensión a la inquietud motora (hiperactividad) y/o impulsividad y, muy a menudo, por una falta de control sobre uno mismo y las propias emociones (falta de inhibición).
Las personas con TDAH tienen la necesidad de estar activas, moverse, hablar, y sus pensamientos corren en sus cabezas. Luchan por seleccionar la información relevante de toda la información recibida porque prestan atención a demasiadas cosas al mismo tiempo. Asimismo, tienden a realizar acciones irreflexivas o hacer comentarios (demasiado) espontáneos.
Presentación combinada (TDA/TDAH)
También hay una presentación combinada de TDAH cuando tanto los niños como los adultos exhiben características de falta de atención e hiperactividad-impulsividad.
El TDA/H es el trastorno más diagnosticado en los niños y afecta entre el 6% y el 9% de los escolares en América del Norte. Se estima que la prevalencia mundial es de más o menos 5%, con el doble de niños que de niñas. Los primeros signos clínicos pueden aparecer a la edad de 3 o 4 años, pero es durante la integración en el entorno escolar que se suele observar una amplificación de las conductas problemáticas.
TDA Y TDAH son también los trastornos que más a menudo acompaña a otro trastorno del desarrollo o una discapacidad de aprendizaje. Al mismo tiempo, algunos trastornos del neurodesarrollo, como la disfagia o la operación en los superdotados , a veces pueden provocar síntomas de TDA, a veces TDAH.
Manifestaciones del TDAH
A continuación, enumeramos las manifestaciones que se observan con frecuencia en los jóvenes con este trastorno, con o sin hiperactividad. Esta lista representa particularmente las manifestaciones de los niños en edad primaria. Los síntomas son algo diferentes o incluso disminuyen en adolescentes o adultos. La diversidad de manifestaciones del déficit de atención con o sin hiperactividad hace imposible enumerarlas de forma exhaustiva.
- Dificultad para seleccionar información relevante.
- Dificultad para permanecer atento durante mucho tiempo en un trabajo.
- La memoria inmediata suele ser deficiente.
- Pérdida y olvido frecuentes de equipos.
- Dificultad para escuchar cuando se le habla.
- Dificultad para seguir instrucciones.
- Alta sensibilidad a las interferencias (se perturba fácilmente si se produce ruido en su entorno).
- Mayor dificultad para ponerse manos a la obra.
- Dificultad para dividir la atención entre dos tareas simultáneas (escuchar y tomar notas).
- Desorganización general (equipo, efectos personales, mochila escolar, etc.).
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Hiperactividad-Impulsividad:
- Tendencia a moverse (pies, manos, retuerce en silla).
- Dificultad para sentarse o levantarse con frecuencia en clase.
- Habla mucho, a menudo demasiado.
- Tendencia a jugar con objetos a su alrededor (por ejemplo, material en su escritorio).
- Dificultad para turnarse y siempre quiere ser el primero.
- Frecuentemente corta a otros (interrumpe).
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