Sustracción de menores, una violencia de la que pocos hablan

La sustracción de menores por parte de uno de los progenitores es un delito del que poco se habla o se conoce, y el cual se perpetra cuando uno de los padres, el que no tiene la custodia del menor, sustrae al niño, niña o adolescente de su ambiente habitual.

“Se denomina sustracción, retención u ocultamiento ilícito a la separación unilateral e injustificada de una niña, niño o adolescente, de la persona que legalmente detenta su guarda y custodia, ocultándolo o trasladándolo lejos de su lugar de residencia habitual”, define la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

En ocasiones, en cárteles de búsqueda se especifica quien se llevó a la persona menor de edad, incluso esto se acompaña con fotos; esta situación se da ya que, al ser un delito, se puede denunciar, y la búsqueda de la víctima de sustracción se lleva a cabo por las autoridades.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) señala que esta acción trasgrede el régimen de convivencia que se pactó entre los excónyuges, por lo que el que no tenga la gurda ni custodia del menor y se lo llevé enfrentará un proceso legal en el que puede declararse penalmente responsable.

Acorde con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) de 2016 los divorcios en el país han aumentado a más de 130 por ciento, mientras que el número de matrimonio disminuyo en 21.4 por ciento, lo que muestra un cambio importante en los modelos de familia.

Según información del Senado de la República, expuesta en su página, los conflictos conyugales son lo que deriva en la sustracción de menores, pues con este acto ilegal se busca lastimar emocionalmente al otro progenitor u obligarlo a hacer algo que el responsable del delito desea.

“De acuerdo con estimaciones de organizaciones sociales y dependencias de gobierno, la sustracción de menores, representa casi el 70% de los casos de niñas y niños desaparecidos en México”, total del cual, se detalla, el 65 por ciento corresponde a la sustracción por alguno de los padres.

Existen dos modalidades en este delito, la sustracción de menores nacional y el modo internacional, casos que se registraban en 2017 con mayor frecuencia en Ciudad de México, Michoacán, Baja California, Chihuahua y Estado de México, pues en esas entidades se originaron el mayor numero de solicitudes de restitución internacional de niñas, niños o adolescentes.

De acuerdo con la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM), citada por Mugsnoticias, en 2020 mil 970 menores han sido reportados como desaparecidos en el país, de los cuales el 27 por ciento continúan como no localizados o desaparecidos.

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