¿Te has puesto a pensar en el impacto que tiene la industria de la carne en el medio ambiente? Desde la producción hasta el transporte y empaquetado, la producción de estos alimentos implica un nivel importante de recursos, además, diversas organizaciones internacionales han destacado que esta elaboración contribuye en gran medida al cambio climático.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) explica que “la ganadería es una de las principales fuentes de emisión de metano”, un gas de efecto invernadero que, según datos expuestos por The Conversation, a finales de 2019 llegó a las mil 875 partes por millones.
“Si las vacas formaran un país, sería el tercero en emisiones de gases de efecto invernadero”, apunta la ONU al detallar el hecho de que el consumo de carne “es una de las formas más destructivas en las que dejamos una huella en el planeta”.
Muchas marcas continúan realizando pruebas de sus productos en animales. Ralph, el conejo, muestra el terrible sufrimiento que soportan en las pruebas y pide que estas se prohíban a nivel mundial de una vez por todas. Mira el corto aquí. 👇https://t.co/Of59Wk2Lm3
— ViBE TV (@ViBETVmx) April 13, 2021
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) señala en un informe que la producción de carne y leche de vacas es responsable de la mayoría de las emisiones, ya que contribuyen con el 41% y 29% respectivamente de las emisiones del sector ganadero.
Mientras que, a nivel general, destaca que se estima que dicha actividad industrial deriva en la emisión de 7.1 gigatoneladas de dióxido de carbono al año, “que representan el 14,5% de las emisiones” de gases invernadero, lo que representa, según
Sin embargo, este no es el único factor en el que la citada industria afecta al medio ambiente, sino que también genera afectaciones a bosques, selvas del planeta tierra, pues estos sitios son talados para plantar soja, el alimento de los animales de crianza, por lo que “es una de las principales causas de la degradación del suelo” debido al sobrepastoreo y la erosión.
Además, esta producción también implica la contaminación del agua pues, según un reporte de la FAO de 2006, esta actividad económica es una de las más perjudiciales para este recurso ya que contribuye a su contaminación con agentes como desechos de animales, fertilizantes, hormonas y otros químicos.
También suma a la “proliferación de biomasa vegetal debido a la excesiva presencia de nutrientes”; el pastoreo en exceso afecta el ciclo del agua, se destruyen arrecifes de coral, “la producción de forraje obliga a desviar importantes cantidades de agua” y esas son solo algunas de las afectaciones a este recurso.
Mientras que el cambio climático es cada vez mas amenazante para la humanidad y los recursos se siguen sobre explotando, la demanda de carne sigue en aumento, pues se estima que para el 2050 esta crezca en un 76%.
La solución no es sencilla, pero el primer paso, además de hacer conciencia sobre el impacto que tiene comer una hamburguesa o comprar un cartón de leche, es reducir el consumo de estos productos.
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