Muerte fetal, un hecho recurrente del que poco se habla

Temas sobre la reproducción humana como el embarazo, el parto, el nacimiento y también el aborto, son comúnmente abordados, sin embargo, la muerte fetal, es un asunto que se ha dejado de lado.

Según datos de la Unicef, cada 16 segundos ocurre una muerte fetal en el mundo, lo que significa que cerca de dos millones de bebés nacen muertos cada año; en las últimas dos décadas 48 millones de bebés nacieron sin vida.

La muerte fetal se define, detallan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, como el nacimiento sin vida de un bebé antes o después del parto. En el primer caso, se considera muerte fetal cuando la pérdida ocurre luego de la semana 20 de embarazo.

Esta, además, se clasifica como temprana, cuando ocurre entre las semanas 20 y 27; tardía, cuando se suscita entre las 28 y 36 semanas de embarazo, y a término que es cuando la muerte del bebé se da luego de las 37 semanas de embarazo.

Causas

Entre las causas que se presentan con mayor frecuencia se encuentran:

Complicaciones durante el parto, como la hipoxia, que es la falta de oxígeno

Hemorragias previas al parto, incluido el desprendimiento de placenta

Infecciones y enfermedades que afectan a la madre

Complicaciones durante el embarazo

La salud general de la madre, pues, detalla la Unicef, se estima que un 10% de las muertes fetales se dan como resultado de la obesidad, diabetes e hipertensión.

La edad de la madre, pues los CDC indican que en comparación, los grupos de más de 35 años han reportado más casos de muerte fetal.

Bajo nivel socioeconómico, debido a la dificulta para ser atendida por un médico al momento del parto o para dar seguimiento al embarazo.

Países de ingresos bajos con más posibilidades

La Unicef señala que alrededor del 50% de las muertes fetales ocurren en: India, Pakistán, Nigeria, República Democrática del Congo, China y Etiopía. Destaca, además, que “de media, el riesgo de que se produzca una muerte fetal es siete veces mayor en los países de ingresos bajos (22,7 muertes fetales por cada 1.000 nacimientos) que en los países de ingresos altos (3 muertes fetales por cada 1.000 nacimientos)”.

También existe una diferencia entre las zonas urbanas y rurales, pues en esta últimas la tasa de muertes fetales es más elevada que en la primera, en tanto, el nivel socioeconómico también es asociado con una mayor incidencia en estos casos.

Depresión y ansiedad

Ante la pérdida de un bebé, las madres y las parejas pueden experimentar depresión, ansiedad y diversos síntomas psicológicos, los cuales se pueden prolongar incluso e embarazos posteriores o luego de dar a luz a un hijo sano.

“La pérdida perinatal constituye una experiencia emocionalmente devastadora para las madres, cuyo duelo se puede prolongar durante un largo periodo de tiempo y en muchas ocasiones de forma silenciosa”, explica la Revista Clínica Contemporánea.

Muerte fetal en México

El INEGI reportó que durante 2019 en el país ocurrieron 23 mil 868 muertes fetales. El 83.4% de los fallecimientos ocurrieron antes del parto, 15.4% durante el parto y el 1.2% no fue especificado. Detalla que las muertes fetales tardías representan el mayor número de casos con 9 mil 387, es decir el 39.9%; le siguen las precoces con 6 mil 29 casos y luego las intermedias, con 8 mil 435 muertes.

Reveló que el grupo de edad de las mujeres que concentraron el mayor número de embarazos en las que el feto murió son el de 20 a 24 años, con el 24.2%, mientras que el de 25 a 29 años representa el 23.4%.

Entre las entidades en las que ocurrieron más casos de muerte fetal se encuentran: Ciudad de México con 4 mil 606 fallecimientos, Guanajuato con mil 562, Puebla con mil 426 y Veracruz con mil ocho.

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