Aunque el virus de Covid-19 se ha apoderado de vidas enteras, varias economías y casi todos los países, los científicos continúan trabajando duro para expandir el conocimiento disponible para la humanidad, una de ellas se trata de la cultiva de ratones en úteros artificiales.
En lo que va del año, los científicos de la Universidad de Tokio han descubierto cómo hacer un costoso bistec en una placa de Petri, y los exploradores antárticos han descubierto “criaturas extrañas” que viven en la plataforma de hielo Filchner-Ronne en completa oscuridad a -2.2 ° C de profundidad.
Embriones en crecimiento fuera del cuerpo vivo
Lo último que se ha hecho es por parte de los científicos israelíes quienes fueron dirigidos por Jacob Hanna, un profesor del Instituto de Ciencias Weizmann, quienes han logrado cultivar embriones in vitro fuera de un cuerpo con éxito.
News & Views: Two Nature papers describe the generation of human blastocyst-like structures in the lab. The findings provide a model for studying early human development. https://t.co/YA3kGtFjHV
— Nature (@nature) March 17, 2021
A lo largo de siete años, el grupo dirigido por el profesor Hanna ha creado un proceso de dos pasos para cultivar embriones de ratón en un útero artificial. Extrajeron 250 embriones de ratones preñados y luego los colocaron en una placa de Petri de laboratorio con la bola pegada a ella como una pared uterina.
Durante este proceso, el equipo de investigación vio crecer el embrión al tamaño de tres capas diferentes, dos y tres veces el tamaño original. El profesor Jacob Hanna dijo que para ellos, esa es la parte más misteriosa e interesante del desarrollo embrionario, y ahora pueden observarla y experimentar con ella con asombroso detalle.
¿Qué podría significar esta investigación para los humanos?
Hasta ahora, el concepto de cultivar humanos fuera del útero sigue siendo un sueño inalcanzable. Sin embargo, este nuevo método de crecimiento embrionario puede ayudar al equipo de investigación a comprender por qué no se han implantado tantos embarazos y por qué la ventana para la implantación en mamíferos es tan corta.
Esperan usar células madre para crear embriones la próxima vez, lo que también ayudará a explorar cómo las condiciones pueden conducir posteriormente a trastornos del desarrollo, de acuerdo con el estudio publicado en la revista Nature.
Incluso pueden responder preguntas básicas sobre por qué las células madre dejan de ser células madre.
Según este experimento, el código genético puede funcionar como “dominó”.
“Creemos que puede inyectar genes u otros elementos en las células, alterar las condiciones o infectar el embrión con un virus, y el sistema que demostramos le dará resultados consistentes con el desarrollo dentro del útero de un ratón. Si le das a un embrión las condiciones adecuadas, su código genético funcionará como una línea de dominó preestablecida, dispuesta para caer una tras otra. Nuestro objetivo era recrear esas condiciones, y ahora podemos ver, en tiempo real, cómo cada dominó golpea al siguiente en la fila”, añadieron en la investigación.
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