Existe mínimo riesgo de contraer Covid-19 por alimentos

Es recomendable su compra en establecimientos fijos que cuenten con medidas sanitarias, verificar caducidad  y mantener en refrigeración 

226
alimentos
Pixabay

De acuerdo con Jorge Francisco Monroy López, de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ) de la UNAM, hasta el día de hoy no se ha comprobado científicamente que los alimentos lleguen a transmitir el Covid-19.

Incluso calificó como insignificante el riesgo de que los alimentos contengan SARS-CoV-2, durante su participación en el programa “La UNAM responde”, que se transmite a través del canal público de esta Máxima Casa de Estudios.

El también especialista del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la FMVZ, comentó que los enlatados cuentan con medidas estrictas de higiene, que permiten confiar en que son alimentos seguros.

Sin embargo, cuando se abren es necesaria su refrigeración, así como aquellos alimentos que son perecederos. Además es de suma importancia que antes de comprar un producto se verifique su fecha de caducidad y seguir las recomendaciones, así como las etiquetas para saber si existen otros riesgos de salud.

Asimismo destacó la necesidad de cocinar los alimentos a temperaturas superiores a 60 grados, misma que se debe alcanzar durante el recalentado. En el caso de consumir en restaurantes, taquerías, fondas o al aire libre, hay que verificar que realmente brindan garantías sanitarias.

“Los puestos callejeros son deliciosos, una tentación, pero con un alto riesgo. Es simple, pensemos que las personas que atienden no tienen donde lavarse las manos”, señaló Monroy López.

Alimentos y algo más

El especialista resaltó que es obligación de todo individuo mantener el aseo personal. Lo anterior al ejemplificar el tema del parásito Taenia o solitaria, si alguien lo tiene puede autoinfectarse si no se lava las manos antes de comer, o llega a contagiar los alimentos al prepararlos.

También resaltó la importancia de evitar la contaminación primaria o de origen, así como la secundaria que se puede dar a partir de un mal manejo de los alimentos.

“Es necesario establecer mecanismos de trabajo, con higiene y separación de superficies para productos crudos y otros que ya no van a recibir tratamiento, como quesos y verduras, para evitar la contaminación cruzada”, consideró.