¿Has sentido que desde que entraste a Facebook o Instagram te sientes más inseguro sobre tu persona, tu carrera y tu vida? ¿Has sentido que a pesar de eso, no puedes dejar de scrollear? Eso es precisamente de lo que habla El dilema de las redes sociales.
Este nuevo documental de Netflix dirigido por Jeffrey Orlowski busca ir detrás de las grandes empresas de redes sociales, sus objetivos y medios con los cuales rastrean absolutamente todo lo que hacemos en internet y generan una especie de adicción.
El dilema de las redes sociales más que pintar como villanos a Mark Zuckerberg o plantear conspiraciones políticas, entrevista a varios exingenieros de Google y Facebook que explican cómo funcionan los algoritmos de esta plataforma y cómo éstos han afectado a gran escala en la salud mental de toda una generación.
¿Por qué verla?
El dilema de las redes sociales se estrenó en el Festival de Sundance en enero, y desde entonces se volvió toda una polémica ya que son los propios ingenieros informáticos los que explican la forma en la que estos gigantes monitorean cada clic y lo monetizan.
El documental hace especial énfasis en los problemas de salud mental que aumentaron tras el apogeo de las redes sociales y cómo, a pesar de que la gente sabe que le provoca ansiedad y depresión, no puede dejar de revisar sus redes precisamente porque los algoritmos hacen adictivas estas plataformas.
Aunque aparecen varios ingenieros, el que lleva el hilo conductor es Tristan Harris, exdiseñador de ética en Google, quien plantea El dilema de las redes sociales en una sola frase: nos ofrecen utopía para conectar y hasta derrocar gobiernos totalitarios y al mismo tiempo la distopia de plataformas insaciables que afectan nuestra salud mental.
Manipulación por AI
Más que caer en la conspiranoia, los ingenieros entrevistados en El dilema de las redes sociales explican como la inteligencia artificial puede manipular nuestro comportamiento virtual a través de la “extracción de atención” que consiste en mantenerte conectado el mayor tiempo posible para que les des más datos de tus intereses y los puedan vender al mejor postor.
Lo anterior, explican los ingenieros, va en contra del mensaje y objetivo primario de generar comunidad que se pusieron empresas como Google o Facebook, quienes crearon una dinámica de mercado que ya no controlan y la cual deben alimentar para sostener las empresas.
El dilema de las redes sociales fue dirigido por Jeffrey Orlowski y fue producido por Larissa Rhodes, escrita Davis Coombe, Vickie Curtis y el compositor Mark Crawford.
