La relaciones laborales también pueden ser tóxicas, y este fenómeno no exclusivo de un puesto específico o nivel jerárquico, ya que los conflictos pueden ejercerse entre jefes, compañeros del mismo rango, e incluso, de empleados hacia los cargos más elevados, aunque este último caso se presenta en menor medida.
Sostener relaciones tóxicas en el trabajo puede traer consecuencias en la salud emocional, mental y física, así que debes detectarlos a tiempo para que tengan un arreglo oportuno. Por ello, en VibeTV te compartimos las señales de las relaciones conflictivas en un entorno laboral.
Señales de las relaciones laborales tóxicas
Críticas destructivas
Cuando se trata de restar valor al trabajo de las personas y en vez de dar soluciones se agrede con palabras ofensivas, mismas que pueden sobrepasar los límites laborales e ir en contra de lo personal, por ejemplo, burlarse de la personalidad, condición o de la forma de vida de la víctima.
División de trabajo desequilibrado
Aunque cada puesto tiene su función, en muchos trabajos, los jefes o compañeros suelen repartir el trabajo de manera desequilibrada, saturando así a alguno de los trabajadores.
Actitud pasiva-agresiva
Cuando no hay retroalimentación y tu trabajo parece serle indiferente a tus compañeros, jefes y demás personas que se desempeñan en tu entorno laboral. Esto se ve cuando una persona está en desacuerdo con alguna situación pero no expresa claramente el motivo que lo hace tener una actitud hostil.
Exhibirte con intención negativa
Puede que sea un mínimo error el que hayas tenido, e incluso, alguno que ni siquiera sea considerado realmente como una falla, pero, el abusador lo toma para exhibirte delante de los demás, haciendo que tu autoestima y nivel emocional se vean afectados. Cuando existen este tipo de circunstancias, las llamadas de atención deben hacerse respetuosamente y a puerta cerrada si el daño sólo te compete a ti y al trabajo.
Ignorar en las relaciones laborales
Esta actitud bastante inmadura suele presentarse mucho en el entorno laboral y puede ocurrir porque alguien se cree con mayor poder, consideran menor el trabajo de otros, o bien, por haberse molestado por alguna circunstancia y, en vez de afrontar el problema, lo ignoran, tratando con indiferencia a los implicados, e incluso, dejándoles de dirigir la palabra.
Atribuirse los logros o el trabajo de otros
Sucede cuando un trabajo en equipo o el que realizaste solo no es aplaudido y encima, los demás compañeros o jefes se atribuyen tus buenos resultados. Ten mucho cuidado con este tipo de actitudes porque es un claro ejemplo de que tu gran trabajo le molesta a los otros. Así que protege tu esfuerzo.
El departamento de recursos humanos debe tener un plan estratégico para salvaguardar los derechos laborales y la integridad de cada empleado, así que una vez que veas este tipo de actitudes, acude a él. También puedes buscar la manera de acercarte respetuosamente con las personas tóxicas para poner límites y solucionar el problema.
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