Omegle es un sitio de chat de video, accesible desde una computadora o un teléfono inteligente. A partir de los 13 años, puedes chatear con cualquier persona. Los más jóvenes pueden hacer amigos o incluso conocer a sus Youtubers favoritos en vivo. Así se veía desde el principio.
El problema es que en varias encuestas se han detectado pornografía, pedocrimen e incluso phishing (técnica fraudulenta destinada a engañar a un internauta para incitarlo a comunicar datos personales). Desde entonces, el creciente éxito de Omegle ha sido noticia y parece bastante preocupante.
Omegle, el recordatorio del por qué no debemos de hablar con extraños
No hables con extraños en la calle, ¿de acuerdo? Omegle.com es un sitio web simple, que ofrece lo contrario: “¡Habla con extraños!” Según con su eslogan. Este es un sistema de chat para hablar por video o enviar mensajes con usuarios aleatorios.
Disponible desde tu ordenador o smartphone, las condiciones para acceder a ella son simplemente ser mayor de 13 años, y obtener la autorización de tus padres.
Crimen infantil, pornografía y phishing
A menudo, los jóvenes visitan este sitio con el objetivo de conocer gente nueva. Buscan ofrecer una experiencia nueva y divertida, más que hacer amigos en la vida real, algo a veces complicado.
Pero también hay influencers de todo el mundo presentes, que se ofrecen a conocer a sus fans en vivo en Omegle. De ahí el atractivo adicional para la plataforma, sobre todo desde los confinamientos.
Sin embargo, la aleatoriedad y la falta de moderación del chat pueden conectar a cualquier menor con personas mayores de 18 años y/o pervertidos sexuales. Y para un niño, pasar de tener una agradable charla con un adolescente de su misma edad a un adulto masturbándose en posiciones extrañas puede ser muy impactante.
Además, Omegle puede ser un buen lugar para “enganchar” a los jóvenes. En el chat puedes ofrecer comunicación en otra red social clásica, como SnapChat, TikTok o Instagram.
¿Cómo prevenir los peligros de Omegle?
Omegle no es el primer sitio en ser atacado por sus peligros para los jóvenes; Estas plataformas también son el punto de referencia de algunos pervertidos sexuales. Entonces, ¿cómo se previene tal comportamiento en los chats de video?
Omegle debería revisar sus métodos de moderación. En su sitio, las reglas establecen claramente rechazar el acoso sexual, el racismo, el comportamiento abusivo u ofensivo, etc. Sin embargo, Omegle advierte que “la moderación no es perfecta. Para que puedas conocer gente que se porta mal”. Los usuarios son los únicos responsables de su comportamiento en línea.
Para no caer en la ansiedad improductiva, los padres pueden intentar abrir un diálogo con sus hijos. Sería cuestión de interesarse por el motivo por el que acuden a estos sitios. O mantener una relación de confianza con el niño, comentando periódicamente sus impresiones, si es consciente de los riesgos, si ya ha estado expuesto a contenidos impactantes, etc.
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