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Día Nacional del Ajolote Mexicano: 5 datos sobre esta especie

Los ajolotes pueden regenerar músculos, huesos y hasta nervios.

Día Nacional del Ajolote Mexicano
Foto: Instagram/@axolotlsweden

Hoy 1 de febrero se celebra el Día Nacional del Ajolote Mexicano, después de que la revista científica Nature publicó el artículo “The axolotl genome and the evolution of key tissue information regulators”.

En este artículo se revelaron los resultados del complejo genoma del ajolote mexicano: 32 mil millones de pares de bases ADN, que representan 10 veces más respecto del genoma humano, con lo que se convirtió en el genoma más grande que ha secuenciado la ciencia.

A partir de dicha publicación, el Senado de la República decretó el 1 de febrero de 2018 el Día Nacional del Ajolote Mexicano, con el propósito de difundir la importancia de los ecosistemas y la cultura mexicana, donde el ajolote forma parte esencial.

Historia del ajolote mexicano

El nombre Ajolote surge en la época antigua de México, donde nominaron a esta especie como “Axolotl” que significa “monstruo en el agua”. Además, esta emblemática especie se localizaba en la Cuenca de México y en la mitología azteca simbolizó el movimiento y la vida.

El nombre científico del ajolote es Ambystoma mexicanum y está catalogada dentro de las salamandras y anfibios. Actualmente, sólo existe en los 180 kilómetros de los canales de Xochimilco, en la Ciudad de México.

Lamentablemente, la especie está en peligro de extinción y su relevancia cultural y biológica hace hincapié en el papel que juega dentro de la sociedad, así como en las actuales estrategias para la preservación del ajolote mexicano.

En honor al ajolote hemos preparado una lista de datos importantes de esta bella especie, mismos que fueron reportados en la Revista UNAM e Instituto de Biología de la UNAM:

Sus inicios en México

De acuerdo con datos de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), se considera que la especie se estableció en la Cuenca de México durante el Pleistoceno tardío, al formarse lagos relativamente someros abastecidos por agua proveniente de ríos y manantiales, así como del deshielo de los volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl, dispersándose a las regiones lacustres de Texcoco, Xochimilco, Chalco y sus conexiones con Xaltocan y Zumpango.

Tiene capacidad de regeneración

El ajolote tiene rasgos y características larvarias, incluso cuando llega a la fase adulta de desarrollo y alcanza una madurez sexual, lo que podría estar relacionado con sus características de regeneración, señaló la investigadora Norma Moreno, académica del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la Facultad de Ciencias de la UNAM.

Las expertas Tania Porras, Maricela Villagrán y Norma Moreno exponen en su artículo El ajolote Ambystoma mexicanum como un modelo versátil en la investigación científica que desde 1768 Lazzaro Spallanzani descubrió la capacidad de regeneración de las extremidades y la cola de este anfibio, lo que marcó el principio de una larga serie de estudios de neotenia y de la misma regeneración.

La especie también ha sido llevada a otras partes del mundo para su estudio, por ejemplo, en 1864, Alexander Von Humboldt recolectó 34 ejemplares y los llevó a París, donde vio que los ajolotes tienen gran capacidad de adaptación al mantenerse en condiciones controladas de laboratorio, fue ahí que se han convertido en modelo clave para la investigación de fenómenos, principalmente biológicos y médicos, como la reprogramación nuclear, la embriología de la inducción de células germinales, el procesamiento de neuronas retinianas.

La mitología del Ajolote

La especie fue incluida en la mitología mexicana al encarnar la última metamorfosis del dios Xólotl, quien, según el relato del arqueólogo mexicano Alfonso Caso, con base en transformaciones pretendía confundir al verdugo y así escapar del sacrificio que pondría en movimiento el Quinto Sol, hasta que fue finalmente capturado y se le dio muerte.

Vestigios prehispánicos que siguen en conservación como esculturas y figuras de jade, piedra y otros materiales, dan cuenta de la importancia en la mitología de nuestro país y ponen de manifiesto la relevancia que tuvo el ajolote en el imaginario de las épocas precolombinas.

Cabe destacar que los antiguos pobladores de la Cuenca de México también usaron a la especie como parte de su dieta y remedio contra algunas enfermedades, situaciones que ahora han sido vetadas por el peligro de extinción en el que se encuentra el ajolote.

Estudios contra el cáncer

Félix Recillas-Targa, director del Instituto de Fisiología Celular de la UNAM, señaló en un estudio de Nature, que si se descifra la cadena de cómo se construye el genoma del ajolote -que incluye 32 mil millones de pares de bases de ADN-, es posible que se descifre su capacidad de regeneración de tejidos. Los ajolotes pueden regenerar músculos, huesos y hasta nervios.

El investigador también refirió que si se encontrara la forma de replicar la estructura del genoma de este espécimen en el humano, sería imposible que una persona regenere una extremidad, pero sí podría ayudar a entender el proceso curativo de una herida, por ejemplo, en los tejidos, los cuales tienen un papel importante en la formación de tumores cancerígenos.

Especie en peligro de extinción

La contaminación del agua de los canales de Xochimilco, hábitat de los ajolotes, son adversas por el crecimiento urbano, y principalmente, por la presencia de especies exóticas que han mermado la población de ajolotes, “al grado que en estos últimos años se considera una especie en peligro de extinción”, explicó el investigador del Instituto de Biología de la UNAM, Rubén Rojas.

Y aunque existen estrategias para la conservación de la especie como es el caso de la Reserva Ecológica del Pedregal de la UNAM, que cuenta con un albergue de ajolotes, la situación tan crítica de la especie no ha podido erradicarse.

El investigador Luis Zambrano, director de la reserva, comenta que uno de los propósitos del proyecto es realizar estrategias y un plan de acción en caso de que el ajolote se extinga en Xochimilco.

Alojar a estas especies fuera de Xochimilco, establece una evaluación para ver la capacidad de adaptación de la especie y saber qué tanto puede sobrevivir en condiciones diferentes, por ejemplo: agua transparente como el río, o más turbia, como es el caso de los lagos.

¿Y tú has visto esta especie a todo color? El ajolote mexicano es muy lindo y la importancia de preservar su especie y hábitat es un tema que nos compete a todas y todos.

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