Las citas a ciegas son un volado echado al aire en el que la única forma que tienes de saber que saldrá bien es viviéndola. Ya sea que hayas conocido a la persona por una aplicación de citas o tu mejor amiga te haya planeado una salida con el amigo de su novio porque cree que harán clic.
Aunque suena tentador y como una manera “fácil” de conocer a alguien, también existen contras como que no sea lo que esperabas, que sus temas de conversación no sean trascendentales o simplemente porque descubres actitudes en la otra parte que simplemente no toleras.
En un inicio la emoción llena cada parte de nuestro cuerpo y nos hace sentirnos nerviosas como adolescentes y hasta pensamos que el sentimiento es recíproco. Sin embargo, a la hora de pasar tiempo con nuestro interés amoroso, caemos en cuenta que por más que lo intentemos no hay química y hasta cierto punto la cita se tornó “complicada”.
6 técnicas para terminar con una cita fallida
- Habla de tu ex
Tal vez esta es la primera regla que nos dicen que nunca debemos de romper, pero si tu intención es hacer que la persona pierda el interés en ti, sin dudarlo se convierte en una salida fácil para hacerle saber que nuestras intenciones no son tener una segunda salida.
Muchas personas sienten un gran repele por aquellas que no han olvidado a algunas de sus exparejas, sobre todo porque no pretenden ser el “clavo que saca a otro clavo”. Así que no dudes en aplicarlo; con la reacción de tu cita sabrás si esto surtió efecto.
- Haz cosas repulsivas
Creías que tu ligue tenía todo el potencial para convertirse en “el amor de tu vida”, pero lejos de subir durante el encuentro, notas que va en decadencia. ¿Qué puedes hacer? Comenzar a realizar todo aquello que a ti (y a la mayoría) les parece repulsivo.
En lo personal, los ruidos que se llegan a escuchar cuando alguien come me saca de mis casillas y eso les pasa a otros. También podrías optar por sonarte la nariz, hurgar en esta misma, aplicarte labial apropósito en los dientes y hasta pedir el platillo más condimentado para que el olor le llegue con tan sólo verte.
- Haz el ridículo
Como dicen: “hacer el ridículo no mata”. Por otro lado, en este caso, es el ridículo lo que te sacará de este desastroso encuentro. Y ni siquiera tienes que preocuparte por eso, porque hacerlo es lo más fácil que hay. Si te falta inspiración, aquí hay algunas vías que puedes explotar:
- Finge una caída, pero de esas que no te harían sentir orgullosa.
- Afirma que estás apoyando algo poco aprobable por la sociedad.
- Haz bromas pesadas y ríete a carcajadas.
- Habla fuerte, muy fuerte.
- Inicia un tema tabú
En las primeras citas nunca (o casi nunca) se tocan temas controversiales como la política, religión, sexo e incluso, dinero. En caso de que las ideas de ambos sean completamente diferentes, puedes convertirte en un ser intenso al defender tus ideales. Seguro eso lo tomará como una red flag.
- Inventa una excusa
También es una forma muy eficaz de finalizar con una cita desastrosa: encuentra una excusa. Sin embargo, tienes que encontrar una buena excusa, porque te arriesgas a disgustarle. Aquí hay algunos ejemplos:
- Tengo que irme temprano, tengo una cita de negocios muy urgente mañana temprano.
- No puedo quedarme contigo mucho tiempo, veo amigos después.
- ¡Oh, ya es tarde! Tengo que madrugar mañana.
- Ah, no te lo dije, vivo en piso compartido con alguien y se enfermó.
- Mi mejor amiga acaba de ser abandonada, realmente tengo que estar ahí para ella.
- Me acaban de pedir unas cosas urgentes del trabajo.
- Ten un cómplice
Antes de ir a tu primera cita, ¿cuál debería ser tu primer instinto?: decírselo a alguien cercano a ti. Esto es necesario por razones de seguridad, pero también por razones prácticas. Es decir, alguien tendrá que saber sobre tu cita y adónde irás en caso de que te suceda algo, pero también es una salida fácil si la cita no sale según lo planeado.
De antemano, acuerda un horario específico para que la persona te llame y te pregunte cómo va la reunión. Si algo anda mal, pueden establecer una palabra clave. Cuando se pronuncia esa palabra clave, la persona que habla por teléfono puede fingir una mala noticia que hará que abandones la cita antes de lo esperado.
Para completar con éxito esta técnica, debes despertar a la actriz que llevas dentro. Si no lo haces bien, corres el riesgo de ofenderle y sabrá de inmediato que encuentras la manera de escapar.
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