En Polonia, los tres parlamentos regionales optaron por reemplazar la declaración de “zona libre de LGBT” por un documento “sobre la defensa de los derechos y libertades fundamentales” que celebra la tradición y defiende la traición cristiana.
Fue durante este martes 28 de septiembre que el alcalde de Cracovia, al sur del país, dijo que era un cambio positivo adoptado por el gobierno regional de la Pequeña Polonia, cuya ciudad es la capital de la provincia.
Los consejos regionales de Lublin y Podcarpacia votaron para aprobar resoluciones similares y, por lo tanto, se unieron a la provincia de Swietokrzyskie de Santa Cruz en el sur, que se convirtió en la primera provincia en romper con la controvertida declaración la semana pasada
En todos los casos, el consejo distrital optó por cambiar el documento que declara “zonas libres de LGBT” en una notificación que confirma que “observan la tradición, respetan el trabajo, la propiedad, la hospitalidad y, lo más importante, respetan la dignidad y los derechos de todos”.
De igual manera, se defendieron las tradiciones cristianas como parte básica del Estado Polaco, según con la agencia internacional EFE. Además, se enfatizó la “pertenencia a la comunidad europea”.
La campaña fue aprobada en votación separada el lunes pasado después de que la Comisión Europea anunciara su intención de pagar fondos de ayuda regional para respetar los derechos de la comunidad LGTBI.
Zbigniew Ziobro, el vicepresidente polaco, calificó la decisión como “terrorismo económico” e hizo el llamamiento a otros gobiernos de la región para que no accedan al chantaje de la Unión Europea.
Alrededor de 100 municipios y gobiernos regionales de Polonia, desde 2019 han aprobado la declaración para designarlos como “zonas libres de LGBT”, criticó Vera Jourová, vicepresidenta de la Comisión Europea durante su visita al país que realizó el pasado 31 de agosto.
Vera enfatizó que dicha documentación “no respetan los valores de la Unión Europea” y optó por amenazar a los gobiernos que acaten a la declaración o en caso contrario podrían perder un total de 2 mil 500 millones de euros en fondos de cohesión.
Por otro lado, Piotr Müller, el portavoz del gobierno dijo que, tanto los gobiernos locales y regionales “no tenían malas intenciones y tenían como objetivo promover los valores familiares” y agregó que “nunca ha habido ninguna zona libre de LGBT en Polonia”.
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