La vegefobia es la fobia o la discriminación a las personas veganas y vegetarianas quienes, al no seguir lo establecido por la mayoría, suelen ser juzgadas, menospreciadas e incluso víctimas de burlas y agresiones hacia sus principios, su ética y decisión.
El medio especializado Idea vegana destaca que esta aversión se basa en la negación, en un miedo inconsciente que se dirige en contra de quien piensa distinto o presenta una alternativa que va en contra de creencias arraigadas.
El discurso que se emite cuando alguien comenta que es vegano, ya sea utilizando el poco informado recurso sobre la salud, la supuesta imposibilidad de ese estilo de vida y hasta a las mofas por creer que es algo que no tiene ni pies ni cabeza, son acciones que muestran claramente el rechazo social hacia este sector.
Las personas veganas, cabe mencionar, son aquellas que han decidido dejar de consumir cualquier producto que implique sufrimiento o crueldad animal, por lo que su alimentación basada en plantas más que una dieta, se caracteriza por ser una postura ética basada en el respeto.
¿Dónde nace el término?
Datos de Bueno y Vegano resaltan que el término vegofobia fue acuñado en 2011, durante una manifestación organizada por Veggie Pride por los derechos de los animales, en París, Francia, en donde se estableció, destaca, que la vegofobia es “el rechazo al vegetarianismo y veganismo éticos (aquellos cuya motivación es defender a los animales y evitar su explotación y maltrato) y la discriminación hacia las personas vegetarianas y veganas”.
La existencia de esta fobia ha sido juzgada como algo exagerado, sin embargo es algo a lo que se suelen enfrentar quienes deciden ser veganos y, que incluso, puede escalar hasta afectarlos, tal es el caso de una situación dada a conocer en 2017 en San Luis, Argentina, en donde un estudiante vegetariano fue víctima de bullyng por su decisión.
Acorde con el medio local TN, al menor, hijo de una familia vegetariana, le gritaban “marica, lechuga”. Además, sus compañeros lo marginaban, no jugaban con él, ni lo invitaban a sus fiestas por su manera de comer.
El temor a lo distinto, pero también al reconocer la existencia de la crueldad animal, son factores que derivan en el rechazo y la discriminación hacia estos grupos, quienes al igual que otros deben ser aceptados, respetados y reconocidos.
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