La situación actual ha sido una detonante para que cada vez más personas comiencen a crear ingresos de manera independiente, una de las formas que más ha ganado popularidad es la venta de diversos productos a través de redes sociales.
Ropa, maquillaje, postres, manualidades, zapatos, objetos de segunda mano, joyería, entre muchos otros, son promocionados en grupos de Facebook, en páginas de Instagram, en muros personales o en las herramientas que ofrecen las redes sociales, las llamadas “tiendas”.
Fotos para atraer, dar información e impactar
Un modo de atraer a los posibles compradores son las fotografías, las cuales ofrecen una mejor idea al cliente potencial sobre cómo se ve el producto qué ofreces y si es lo que busca.
Las imágenes deben ser nítidas, de buena calidad, con colores de fondo o elementos que no opaquen lo que estás ofertando y, si se puede o aplica, deben ser varias, en las que muestres los detalles de lo que vendes.
Estos son algunos tips para que tengas imágenes visualmente atractivas que inciten al cliente potencial a darles clic, preguntar por los productos y finalmente adquirirlos.
La iluminación
Puedes tener fotos increíbles tomadas con tu celular si juegas de manera adecuada con la luz, puedes hacerte de algún kit básico de iluminación o, para ahorrar, puedes aprovechar la luz del sol, que, aunque no es controlable la idea es que tu foto no se vea oscura ni con exceso de luz.
Busca un sitio en donde la entrada de luz sea equilibrada, configura los filtros de tu celular si crees que se necesita un poco más o menos y finalmente sino te convence del todo la foto con esa iluminación puedes recurrir a un editor en línea para cambiarla un poco y que se acerque a lo que buscas.
Recuerda que también puedes jugar con la sombra de tus objetos para darles profundidad.
Fondo
Con materiales económicos, sencillos y que encuentras en cualquier lugar puedes hacer tu propio set de fotografía de producto.
Si lo que vendes es algo llamativo, con mucho color o con detalles específicos en los que quieres que se centre la atención, lo ideal es optar por una tela blanca, la cual puedes montar en una mesa, poner detrás una estructura de cartón o madera y extenderla.
Agrega en ella algunos toques distintivos que combinan bien con tu producto, como pueden ser plantas pequeñas, alguna flor, una rama, una rodaja de alguna fruta o pintura salpicada para hacerlo más divertido, no existen límites, juega con las paletas y complementa lo que vendes con algo que no opaque tu foco principal.
El producto
Si se trata de un postre, algún platillo o un alimento en frasco, bolsa o lata lo principal es que se vea apetecible, por lo que puedes centrarte en que la luz impacte en los colores del postre o platillo, poner alrededor de este algunos de los ingredientes que usaste o colocarlo sobre una mesa que luzca bonita, como si estuviera listo para comerse.
En cambio, si es ropa, ya sea nueva o de segunda mano la idea es que el comprador pueda ver los detalles de esta, así que un fondo simple blanco con algún accesorio si lo deseas, en el que las características y el color sean fieles a la prenda es lo mejor.
Opta, en ese caso, por tomar un par de fotos extra a detalles bonitos de la prenda o en los que se pueda apreciar la tela, de ese modo le das un panorama más amplio a quien busca adquirirla.
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