Un joven de 26 años pasó momentos de pánico cuando, en una caminata por la montaña, un puma comenzó a acecharlo durante seis minutos, lapso en el que el joven grabó como el felino lo persiguió durante todo el sendero.
El video del puma acechando al joven durante su paseo en la montaña se volvió viral este fin de semana debido al impacto que provoca ver al felino caminar muy de cerca del montañista, quien, sin éxito, intenta alejarlo con gritos y ruidos
Afortunadamente, Kyle Burgess (el joven acechado por el puma) conocía bien las reglas básicas para sobrevivir en estos casos en los que una persona se enfrenta a un animal salvaje.
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Seis minutos de terror
Todo sucedió el pasado 12 de octubre cuando Kyle Burgess salió a pasear en una ruta para senderistas conocida como Slate Canyon (un anillo de 13.7 kilómetros), muy cerca de Provo, Utah, en Estados Unidos.
Burgess trató de grabar con su cámara una cría de puma que vio en el sendero cuando, de la maleza, salió madre que estaba vigilándolas desde lo lejos (generalmente están escondidas precisamente para acechar a invasores).
Así fue como inició los seis minutos más difíciles de Burgess, quien no dejó de grabar durante todo el tiempo que la puma estaba acechándolo en el sendero. Como se ve en el material, el felino camina lento y de repente da un par de brincos para acercarte.
Rápidamente el material se volvió viral por la tensión que se siente en todo el video, ya que mientras Burgess trata de alejarlo con ruidos y gritos, el puma sigue caminando pegado a él, haciendo como que saltará en cualquier momento.
Por suerte, Burgess tenía presentes las dos reglas más importantes para los montañistas cuando se encuentran con un puma en su hábitat natural (e incluso en cautiverio): no te acerques a las crías y nunca le des la espalda.
Si bien la primera regla ya no la cumplió el joven de 26 años, la segunda sí. Tal y como se aprecia en el video jamás le dio la espalda al felino algo que habría hecho que el animal se sintiera seguro para atacar.
Tras seis minutos de persecución, el puma da un último brinco y después da la media vuelta para regresar a toda velocidad con sus crías, mientras Burgess se sienta un rato en el sendero para tratar de calmarse.
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