Una vez más, JK Rowling, la autora de los libros de Harry Potter se ve envuelta en una polémica en redes sociales tras el estreno de su nuevo libro Troubled Blood. La escritora vuelve a ser el centro de atención porque algunos críticos consideran que su novela tiene un trasfondo transfóbico, algo que llega con mucho más fuerza por los comentarios sobre las personas trans que ha hecho en el pasado.
Troubled Blood es la quinta entrega de una serie de libros que cuentan la historia de los detectives privados Cormoran Strike y Robin Ellacott. Bajo el seudónimo de Robert Galbraith, Rowling agregó un nuevo personaje, Dennis Creed, que consiste en un trasvesti que es un asesino en serie.
Las críticas surgieron hacia la autora después de que The Telegraph revelara a este nuevo personaje en su reseña. Y tal como el crítico lo predijo, este nuevo personaje sería un escándalo. “Uno se pregunta qué harán los críticos de la postura de Rowling sobre las cuestiones trans de un libro cuya moraleja parece ser: nunca confíes en un hombre con un vestido”. Sin embargo, el resto de lo dicho sobre el libro gira alrededor de la baja calidad en comparación con los primeros libros de Strike.
JK Rowling se ha ganado la fama de ser transfóbica en ocasiones anteriores. La última vez se debió a un tweet en el que paradójicamente buscaba defender a una mujer que había sido despedida por manifestar su oposición a ciertas medidas gubernamentales de Reino Unido, las cuales buscan que cualquier persona pueda identificarse con un género distinto.
Las reacciones en su contra han provenido incluso de fanáticos que son transexuales y no pueden creer que su autora favorita de la infancia sea quien los está discriminando. El próximo libro, que por cierto, tuvo dificultad para salir a la luz ya que las editoriales no querían aceptar publicarlo después de los escándalos, saldrá a la venta hasta el próximo martes en EE. UU.