
Con la llegada de los fríos y las bajas del termómetro, nuestra piel tiende a debilitarse por el frío, el viento y los incesantes cambios de temperatura entre el interior y el exterior. Se seca, se siente tensa y se ve con un tono grisáceo. Por tanto, es necesario adoptar los reflejos adecuados para proteger tu piel de las agresiones externas y mantenerla intacta.
5 maneras de hidratar tu piel en clima frío
- Adapta tu dieta
Antes que nada, no olvides que una buena piel también pasa por una buena alimentación. Al aumentar el consumo de frutas y particularmente de cítricos, se llenará de vitaminas que le permitirán mantener un brillo saludable.
También aumentaremos las vitaminas A que se encuentran en la mantequilla, los huevos, la carne así como los omega-3 y 6 presentes en las nueces, almendras y avellanas. No olvides hidratarte bien y reducir tu consumo de café y tabaco, esos vicios que te resecan por dentro.
- Cuida el interior de tu hogar
En tu hábitat, la temperatura está limitada a 20 ° C y el aire se humidifica para evitar grandes diferencias entre interior y exterior.
- Evita las duchas largas y calientes
La tentación de tomar una ducha muy larga y casi caliente cuando hace mucho frío afuera es tentadora. Sin embargo, debes evitarlos por completo porque dañarán tu piel. Opta por baños rápidos y cálidos, menos de 10 minutos. Infortunadamente, los baños calientes prolongados también están prohibidos si te preocupas un poco por tu piel. También, por supuesto, necesitarás hidratar de tu cuerpo a fondo cuando salgas de la ducha.
- Aceite vegetal en el rostro
Almendra dulce, aguacate, macadamia o incluso argán, unas gotas de aceite vegetal aplicadas sobre tu piel sensible por la noche permitirán que se hidrate suavemente. ¡Cuidado! Estos deben aplicarse después del sérum y antes de la crema. Las pieles normales deberán usar la jojoba, mientras que las pieles mixtas deberán optar por la avellana, y el aguacate es una apuesta segura para pieles muy secas.
- Abusa de las mascarillas
En climas fríos, las mascarillas -hidratantes para pieles tensas, nutritivas para llagas localizadas o resequedad- aplicadas varias veces a la semana pueden ayudar a compensar la falta de piel. Para las pieles más resecas, se recomienda hacerlas cada dos noches.
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